Dr. José Rubén Jara Elias


En la preparación del libro homenaje a Rubén Jara Elías (2022) se les solicitó a los expresidentes y la directora de AMAI dieran un testimonio. Estos son los textos recabados.


ANA CRISTINA COVARRUBIAS
Presidenta AMAI 1997-1998

Nada más merecido que homenajear a Rubén por su trayectoria académica y profesional siempre exitosa, y su visión de negocios. Difícil es reunir en una misma persona las variadas aptitudes que Rubén siempre ha tenido. Aparte de su rigor metodológico a la vez que practicidad y sentido profundo del humor.

Rubén Jara es EL fundador de la AMAI en tanto que lideró al grupo de investigadores que crearon la Asociación.

Rubén Jara es el inspirador de las más importantes aportaciones que la AMAI ha hecho a la industria de investigación de mercados y opinión pública: los NSE / Regla AMAI, el código de ética y la buena práctica profesional, los estándares de calidad de servicio de investigación en México/ ESIMM.

Rubén Jara siempre ha buscado la profesionalización y el fortalecimiento de la industria, darle valor a la investigación y contribuir al éxito de sus clientes.

Por todo ello me sumo de todo corazón al homenaje que la AMAI le rendirá a Rubén el próximo 27 de octubre [de 2016]. Lamentando no estar presente en ninguno de los dos eventos, por motivos de salud. Les mando un grande abrazo con el afecto de toda una vida de excelente camaradería.

[Texto escrito en octubre de 2016. La Dra. Covarrubias murió en mayo de 2020]


JAVIER ALAGÓN
Presidente AMAI 1999-2000

Quiero mucho a Rubén y lo admiro. Estoy más que cierto que su visión y elocuencia fueron muy importantes para crear y consolidar nuestra asociación. Considero que su mayor aportación fue el liderazgo explícito al principio e implícito muchos años después. Fue un gran visionario a lo largo de su vida y fuimos afortunados de cobijarnos en la asociación con su visión y perspectivas.

Más allá de eso, lo considero un amigo generoso; siempre me sentí cuidado por él. Sentimiento que corroboré cuando jugábamos golf y me daba maravillosos consejos, técnicos algunos, pero más de enfoque y perspectiva de cómo jugar.

Admiré la elocuencia que tenía para poder llegar a consensos en la AMAI, aún en temas álgidos. Frecuentemente vi como varios de mis colegas cambiaban de posición después de un discurso improvisado por Rubén.

Además, es un gran ser humano. Yo lo valoro mucho como profesional, pero mucho más por la gran persona que ha sido para poder consolidar el grupo que formamos en la AMAI, que se forjó bajo su liderazgo.


EDMUNDO BERUMEN
Presidente AMAI 2001-2002

Conocí al joven Rubén Jara a principios de los ochenta, cuando estaba interesado en que Arturo García y yo le diseñáramos una muestra maestra que pudiera soportar el levantamiento de varias encuestas a lo largo de un par de años. Me sorprendió su agudeza para precisar sus requerimientos en términos de población objetivo, cobertura, desagregaciones, niveles de precisión y confianza para variables prioritarias.

Un cliente fuera de serie en esos años, y aun hoy.

Le hicimos la propuesta y la compró. Muchos años después me invitó a integrarme a la naciente AMAI; no acepté de inmediato pues mi empresa (Berumen y Asociados) tenía poco tiempo de estar funciones (abril 1992), pero le pedí que me abriera la puerta una vez tuviera al menos tres años operando. El tiempo pasó y finalmente ingresé a nuestra querida AMAI.

Rubén seguía siendo la bujía principal de AMAI, promoviendo estándares éticos y profesionales para el gremio, y convenciendo uno a uno a los asociados de la conveniencia de compartir información, entonces celosamente guardada, para el beneficio de la industria y de cada socio. Al corto tiempo convenció a todos y verificamos cuánta razón tenía.

Su natural alegría no restaba fuerza a su honestidad profesional y la firmeza con la cual defendía el rigor que todos debíamos tener en cada una de nuestras actividades, a nivel ético y profesional. Con su impulso se estableció el primer estándar de la industria, el ESIMM, y fue paladín en establecerlo como un requisito de ingreso a AMAI. Pienso que esas fueron sus dos aportaciones principales en AMAI: convencernos a compartir datos de la industria y el filtro del ESIMM para el ingreso a AMAI.

Un saludo con afecto a Rubén Jara, un líder indiscutible en la industria y pionero en la medición de ratings en México.


CÉSAR ORTEGA DE LA ROQUETTE
Presidente AMAI 2003-2004

A Rubén le caben bien varios calificativos: ha sido generoso, compartido, inspirador de confianza; todo lo cual impulsó a su consistente interés, casi obsesivo para elevar la calidad del gremio. Sin su liderazgo la industria hubiera tardado muchos años más en llegar al nivel que tiene, y quizá su panorama sería mucho muy distinto.


EDUARDO RAGASOL
Presidente AMAI 2007-2008

Las empresas de la AMAI somos portadoras de información muy valiosa, clave para el desarrollo de los negocios y para el desarrollo en general del país. Tenía que haber un reconocimiento de esa garantía. Y Rubén impulsó que eso sucediera al ser un impulsor de lo que después llamamos Valor Social de la Información.


RICARDO BARRUETA
Presidente AMAI 2009-2010

Si eres un profesional de la industria de la investigación de mercados en México con algunos años de vuelo (Generación X o Baby Boomer), es prácticamente imposible no pensar en Rubén Jara como uno de los pilares que impulsaron y formalizaron la práctica de esta importante actividad en México. Desde su rol preponderante para la formación de la AMAI en su condición de miembro fundador, hasta su incansable esfuerzo por difundir y democratizar las mejores prácticas de la industria a través de un Sistema de Administración de Calidad, Rubén es sin duda también el iniciador de este hito que ahora es un distintivo de los miembros AMAI: el trabajo formalizado bajo estándares mínimos de calidad para la industria de investigación.

Pero Rubén, además de ser un gran empresario, siempre se ha caracterizado por ser un hombre que sabe escuchar, que le gusta tomar todas las opiniones que se tengan que decir alrededor de los temas importantes antes de emitir su opinión para finalmente dar la suya. Y había que escuchar a Rubén cuando finalmente tomaba la palabra. Con una gran capacidad de síntesis de todo lo escuchado y haciendo uso de sus grandes capacidades como comunicador, daba una breve cátedra sobre los temas tratados con tal claridad y síntesis de lo discutido, que no hacía falta agregar una sola coma más a su comentario, que casi siempre se convertía en cierre consensuado de las discusiones.

Y aunque Rubén siempre mantenía la cordura y se dirigía al gremio con sumo respeto, entendiendo diferentes puntos de vista y argumentando los suyos en un ambiente de inclusión y diversidad de opiniones, recuerdo un incidente que sin desbordarse del todo resultó en un ligero desvío a su regular manera de actuar. Estábamos en una asamblea de AMAI en medio de una discusión acalorada sobre la obligatoriedad para los miembros AMAI para adoptar un Sistema de Administración de Calidad y claramente había opiniones encontradas en la mesa.

Los argumentos en ambas direcciones eran de todo tipo, desde los más racionalizados hasta algunos más bien de corte visceral. Rubén, siendo si no mal recuerdo el responsable el Comité de Calidad en ese momento, al calor de la discusión y con toda la pasión sobre el tema tras años de trabajo invertidos se salió de su tradicional estilo amable y pausado.

Dando un golpe en la mesa y con un tono de voz a todas luces más elevado de lo usual dio su comentario final, con el mismo efecto de cerrar la discusión, pero esta vez con un silencio sepulcral de la audiencia ante el asombro de los presentes por verlo salirse ligeramente de sus casillas, cosa no usual en él en este tipo de situaciones. La brillantez humorística de nuestro querido Manolo Barberena llevó a que, durante unos años, y todavía de vez en vez, quienes gozamos de su amistad le llamáramos "Pajarito" en remembranza de aquel Toro de la ganadería Cuatro Caminos que el 29 de enero de 2006 se brincara hacia las gradas de la Plaza México y por unos segundos creara un pánico colectivo entre los asistentes.


GABRIELA DE LA RIVA
Presidenta AMAI 2011-2012

Lo más relevante de Rubén para mí ha sido su persistencia y pasión en el tema de la Calidad, la ética y la profesionalización de los socios del gremio.

Su seriedad y no de gratis la anécdota famosa de "Pajarito". Que lo pinta perfecto.

Rubén es de esos personajes que ¡hacen falta en cualquier gremio! Los que pelean, defienden, convocan y arrastran con convicción y entusiasmo al grupo hacia el futuro y hacia las cosas bien hechas.

Con un lado siempre amable y cariñoso.


LUIS WOLDENBERG
Presidente AMAI 2013-2014

La investigación en México se divide en dos etapas: antes y durante Rubén. Quien marca un parteaguas en nuestra disciplina es, desde luego, el Dr. Jara...el gremio ha crecido y embarnecido gracias a que Rubén inventó una nueva manera de relacionarnos.

Ese estilo de convivencia fue mérito de Rubén, quien no solamente logró habernos reunido sino también propició una forma civilizada de relación de competencia, que a la postre derivó en un grupo de amigos que nunca quisieron destrozarse unos a otros, como desafortunadamente sucedió en otros países de nuestra región.

Por Rubén tuvimos un espacio de convivencia y reflexión que nos permitió florecer como industria.


HERIBERTO LÓPEZ ROMO
Presidente AMAI 2015-2016

Gracias a Rubén me involucré en la formación de AMAI. Siempre ocupado en múltiples proyectos, nos mandaba a Alex Garnica y a mí en su representación a las primeras reuniones donde se discutía la formación de la asociación.

Las instrucciones para nuestra participación enfatizaban la necesidad de profesionalizar la industria de la investigación y la importancia de contar con una asociación de verdaderos colegas.

Los niveles socioeconómicos, la norma de calidad, los congresos, las revistas y muchos de los proyectos fundacionales de la asociación estuvieron inspiradas en estas dos ideas clave de Rubén.

Después de ser el primer presidente, el Dr. Jara se constituyó en el líder moral y maestro de quienes fuimos presidentes posteriores.

En las asambleas, momentos críticos, pronunciaciones públicas y en las festivas celebraciones de la asociación, la presencia de Rubén se volvió indispensable.


ÓSCAR BALCÁZAR
Presidente AMAI 2017-2018

Al escribir la historia de la Investigación de Mercados y de Opinión Pública en México, necesariamente surge de manera natural y obligada la brillante presencia del Doctor Rubén Jara.

Otras muchas personas que también han tenido paso importante en dicha historia surgieron y crecieron a la sombra de Rubén Jara. En lo personal, he sido testigo por más de 30 años en el medio, que cuando surge el nombre de Rubén con cualquier colega o cliente, los testimonios de reconocimiento y gratitud surgen de manera automática, prodigando reconocimiento y agradecimiento a lo mucho que ha dejado con gran cantidad de colegas.

La generosidad de Rubén no solo se limita con aquellos colegas que tuvieron el privilegio de compartir alguna etapa de su brillante carrera, sino que abarca en general a todos los que integramos la industria, lo cual quedó evidenciado en su paso en la Asociación Mexicana de Agencias de Investigación de Mercados y Opinión, nuestra querida AMAI, donde tiene el merecido reconocimiento de ser socio emérito.

Hace aproximadamente tres décadas Rubén fue uno de los principales promotores que apoyaron la gestación de la AMAI, tarea que para muchos “competidores” parecía una misión prácticamente imposible de lograr. Su labor no se limitó a integrar por interés profesional a las principales empresas proveedoras de servicios de Investigación, sino que logró que esa mesa de “competidores” que solo se conocían haciendo antesala en las oficinas de los clientes, se pudieran integrar en una misión de verdaderos amigos con intereses e inquietudes comunes, donde el esfuerzo individual en favor de la industria se queda corto con la suma de esfuerzos colegiados de los colegas.

En tal sentido, la presencia del Doctor Jara como primer presidente de AMAI fue fundamental para la integración del gremio, convirtiendo a quienes antes sólo competían por proyectos, en una organización que trabaja con la convicción de que el esfuerzo individual se queda corto cuando se suma con el que se realiza junto a los demás amigos que son colegas, pero cabe destacar en dicha tarea, que aparentemente se limita a cuestiones técnicas, fue ampliamente superada ya que se formó un grupo de verdaderos amigos, donde en lo personal he aprendido a valorar mis esfuerzos al compartirlos con quienes antes veía solo como competidores, dándole un nuevo sentido muy valioso a mi presencia en el mundo de la Investigación de Mercados y en un concepto de amistad más amplio e incluyente.

Me tocó compartir con Rubén la misión que se propuso para favorecer la profesionalización de nuestra industria de investigación, al proponer el establecimiento de normas mínimas que garanticen servicios de calidad en nuestra actividad profesional; Rubén fue fundamental para la elaboración de la primera versión del ESIMM, así como para la promoción del mismo como un requisito de pertenencia en AMAI, contando con la certificación realizada por un auditor externo, que en su labor, Rubén también capacitó.

En dicho ejercicio me tocó vivir la etapa más intensa de mi relación profesional con Rubén. Fue para mi impresionante ver cómo nos convencía a todos con gran amabilidad, pero con enorme firmeza por el peso de sus argumentos para crear las normas y comprometernos con la obligación de cumplirlas.

Para mí esa fue una muy valiosa contribución de Rubén a nuestro gremio, posterior a su brillante actuación de convocatoria en el inicio de AMAI.

Fuera de ello, quienes gozamos del privilegio de mantener lazos de amistad con Rubén, debemos reconocer que siempre encontramos en el un comentario ameno y una plática enriquecedora, de esas que solo se tiene con las personas brillantes que van dejado huellas importantes en los caminos que recorren.

Gracias Rubén por tu amistad y tú invaluable aportación a lo que en principio nos unió: nuestro interés por hacer de esta industria algo mejor cada día.


CLAUDIO FLORES
Presidente AMAI 2019-2020

El Dr. Rubén Jara tiene muchos logros en su trayectoria; destaco solamente cuatro. Primero: obtuvo el doctorado en comunicación por la Universidad de Michigan antes de los 25 años de edad. Fue también fundador de la maestría de comunicación de la Ibero, de la cual yo soy orgullosamente egresado.

Igualmente fue el primer presidente de la AMAI, que creó este foro muy relevante de nuestra industria. Y además fue el maestro de muchas generaciones de talentosas y talentosos investigadores de mercado que siguieron sus enseñanzas.

Hoy Rubén es una figura emblemática de nuestra industria y un faro para ilustrar hacia dónde tenemos que ir.


GREGORIO DE VILLA
Presidente AMAI 2021-2022

Decir que conozco a Rubén Jara me llena de orgullo; es sin duda uno de los colegas que más admiro. Dos momentos me vienen a la mente cuando pienso en Rubén:

El primero, cuando lo conocí hace 30 años, en el primer Congreso Internacional del gremio en México (creo, de ESOMAR). Se acercó a mí, se presentó y me preguntó: "por qué tu empresa no se afilia a AMAI, qué esperas amigo". Su gran liderazgo, amor a la profesión y vocación de servicio hicieron posible crear una comunidad gremial única, referente de la industria de inteligencia aplicada en nuestro país.

Luego, hace casi 20 años, en una reunión con colegas para discutir problemas y oportunidades de la industria. Todos los presentes coincidimos en que el trabajo de campo cara a cara tenía oportunidades de mejorar, pocos aportaron ideas, pero sólo Rubén tomo acción para contribuir a la mejora; “los encuestadores son los verdaderos investigadores de mercado, son nuestra materia prima y debemos dignificar su actividad”, afirmaba. Gracias Rubén, por ser ejemplo e inspiración.


GABRIELA SACAL
Directora General AMAI

La mejor contribución de Rubén Jara para AMAI y el gremio es él mismo.

Hablar de Rubén Jara es hablar de un ícono de la industria y pilar de la AMAI por sus innumerables aportaciones. Hay que resaltar que él fue quien, con el objetivo de profesionalizar la industria, tuvo la iniciativa y visión de conformar una asociación que permitiera reunir en un mismo ente a las agencias dedicadas a la investigación de mercados. Fue así como Rubén, junto con otros grandes, fundaron la AMAI en 1992.

Su incansable gusto y deseo por engrandecer la actividad de investigación lo motivó a crear un sistema de calidad dentro de la asociación que permitiera generar confianza y credibilidad por parte de los clientes. Así nació la ardua tarea de construir lo que hoy conocemos como ESIMM®

"Estándar de Servicio para la Investigación de Mercados en México".

Pero más allá de sus contribuciones profesionales, en la industria, la academia y otros ámbitos, reitero que la mayor aportación que ha hecho es entregarse como ser humano íntegro, demostrando pasión, compromiso, amor y entrega total en cada uno de los proyectos que ha realizado. El legado que deja es enorme y es una enseñanza de vida de la que todos tenemos algo que aprender e imitar.